A 3 km. de Tapalpa se encuentra la pintoresca comunidad de Atacco, que fue el lugar por donde los frailes franciscanos comenzaron la evangelización de esta zona de Jalisco. Por iniciativa de los franciscanos se construyó el Hospital de Indios, que todavía se conserva, en el que los indígenas recibían atención en la medida que lo permitía la Medicina de ese tiempo. A Atacco, que significa «Lugar donde nace el agua» en lengua indígena, se llega a través de un camino de terracería y cuenta con un sencillo balneario cuyas aguas son proporcionadas por los manantiales que explican el nombre indio del pueblo.

Aquí se encuentra el Hospital de Indios, que se encuentra entre dos capillas que en épocas remotas pertenecieron a los Franciscanos; ellos mismos administraban junto con los indios este hospital, que, por cierto, se encuentra aún en proceso de restauración, pues su deterioro fue considerado grave, víctima de los actos vandálicos.

Hoy en día se encuentra activo y es atendido por un grupo de oriundas del municipio que, con décadas de experiencia en la medicina tradicional y natural, ofrecen servicios mediante hierbas y preparados para todo tipo de enfermedades. Asimismo, a un costado del hospital se conserva la “farmacia viviente”, donde se cultivan muchas de las plantas que se emplean como medicina.